EVANGELIO DEL DÍA: MATEO 19,27-29: Nosotros lo hemos dejado todo y te hemos seguido… recibirá cien veces más y heredará la vida eterna.

san benito

EVANGELIO DEL DÍA:
MATEO 19,27-29: Nosotros lo hemos dejado todo y te hemos seguido… recibirá cien veces más y heredará la vida eterna.

Entonces dijo Pedro a Jesús: «Ya ves, nosotros lo hemos dejado todo y te hemos seguido; ¿qué nos va a tocar?». Jesús les dijo: «En verdad os digo: cuando llegue la renovación y el Hijo del hombre se siente en el trono de su gloria, también vosotros, los que me habéis seguido, os sentaréis en doce tronos para juzgar a las doce tribus de Israel. Todo el que por mí deja casa, hermanos o hermanas, padre o madre, hijos o tierras, recibirá cien veces más y heredará la vida eterna.

PISTAS PARA LA MEDITACIÓN:

Celebramos hoy la fiesta de San Benito, abad. En la Audiencia General del 9 de abril del 2008, el Papa Emérito, Benedicto XVI, la dedico a San Benito: “« San Benito […]Sólo quería agradar a Dios: [… ]Al contemplar a Dios comprendió la realidad del hombre y su misión. En su Regla se refiere a la vida monástica como «escuela del servicio del Señor» y pide a sus monjes que «nada se anteponga a la Obra de Dios», […] Su figura, descrita sobre todo en el segundo capítulo de la Regla, con un perfil de belleza espiritual y de compromiso exigente, puede considerarse un autorretrato de san Benito, pues —como escribe san Gregorio Magno— «el santo de ninguna manera podía enseñar algo diferente de lo que vivía». El abad debe ser un padre tierno y al mismo tiempo un maestro severo, un verdadero educador. Aun siendo inflexible contra los vicios, sobre todo está llamado a imitar la ternura del buen Pastor, a «servir más que a mandar», y a «enseñar todo lo bueno y lo santo más con obras que con palabras». Para poder decidir con responsabilidad, el abad también debe escuchar «el consejo de los hermanos», porque «muchas veces el Señor revela al más joven lo que es mejor». Esta disposición hace sorprendentemente moderna una Regla escrita hace casi quince siglos. Un hombre de responsabilidad pública, incluso en ámbitos privados, siempre debe saber escuchar y aprender de lo que escucha.
San Benito califica la Regla como «mínima, escrita sólo para el inicio»; pero, en realidad, ofrece indicaciones útiles no sólo para los monjes, sino también para todos los que buscan orientación en su camino hacia Dios. Por su moderación, su humanidad y su sobrio discernimiento entre lo esencial y lo secundario en la vida espiritual, ha mantenido su fuerza iluminadora hasta hoy […] Hoy Europa, recién salida de un siglo herido profundamente por dos guerras mundiales y después del derrumbe de las grandes ideologías que se han revelado trágicas utopías, se encuentra en búsqueda de su propia identidad. »”

En el Evangelio de hoy encontramos la pregunta de Pedro al Señor sobre el futuro, sobre la recompensa que recibirán por haberle seguido: ¿Qué nos va tocar?, El Señor aprovecha la pregunta de Pedro para mostrarnos que en generosidad nadie gana a Dios. La recompensa será grandísima. Traigo las palabras pronunciadas por el Papa Benedicto XVI en el inicio de su ministerio petrino donde nos habla de dicha generosidad por parte de Dios: “En este momento mi recuerdo vuelve al 22 de octubre de 1978, cuando el Papa Juan Pablo II inició su ministerio aquí en la Plaza de San Pedro. Todavía, y continuamente, resuenan en mis oídos sus palabras de entonces: “¡No temáis! ¡Abrid, más todavía, abrid de par en par las puertas a Cristo!” El Papa hablaba a los fuertes, a los poderosos del mundo, los cuales tenían miedo de que Cristo pudiera quitarles algo de su poder, si lo hubieran dejado entrar y hubieran concedido la libertad a la fe. Sí, él ciertamente les habría quitado algo: el dominio de la corrupción, del quebrantamiento del derecho y de la arbitrariedad. Pero no les habría quitado nada de lo que pertenece a la libertad del hombre, a su dignidad, a la edificación de una sociedad justa. […] el Papa quería decir: ¡no! quien deja entrar a Cristo no pierde nada, nada –absolutamente nada– de lo que hace la vida libre, bella y grande. ¡No! Sólo con esta amistad se abren las puertas de la vida. Sólo con esta amistad se abren realmente las grandes potencialidades de la condición humana. Sólo con esta amistad experimentamos lo que es bello y lo que nos libera. Así, hoy, yo quisiera, con gran fuerza y gran convicción, a partir de la experiencia de una larga vida personal, decir a todos vosotros, queridos jóvenes: ¡No tengáis miedo de Cristo! Él no quita nada, y lo da todo. Quien se da a él, recibe el ciento por uno. Sí, abrid, abrid de par en par las puertas a Cristo, y encontraréis la verdadera vida.”

Hoy sábado, día donde acudimos a la escuela de la Santísima Virgen María, Ella nos muestra el camino para hacer de nuestra vida una entrega a la voluntad de Dios, a Ella nos encomendamos para que nos ayude a cada uno de nosotros a vivir para Él. Que María nos ayude a ser todo y solo de Dios. Que tengas un buen día.
J.A.M.(Chechu)sacerdote.

Picture of Jesús Aguilar Mondéjar
Jesús Aguilar Mondéjar

Consiliario del Movimiento de Cursillos de Cristiandad de la Diócesis de Cartagena.

WhatsApp
Facebook
Email
Imagen del autor

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Abrir chat
¿Hablamos?
Cursillos de Cristiandad - Murcia
Contáctanos si necesitas algo 😊