EVANGELIO DEL DÍA:
Mt 11,25-30: Aprended de mí.
En aquel tiempo, exclamó Jesús:
-«Te doy gracias, Padre, Señor de cielo y tierra, porque has escondido estas cosas a los sabios y entendidos y se las has revelado a la gente sencilla. Sí, Padre, así te ha parecido mejor. Todo me lo ha entregado mi Padre, y nadie conoce al Hijo más que el Padre, y nadie conoce al Padre sino el Hijo, y aquel a quien el Hijo se lo quiera revelar. Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os aliviaré. Cargad con mi yugo y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón, y encontraréis vuestro descanso. Porque mi yugo es llevadero y mi carga ligera.»
PISTAS PARA LA MEDITACIÓN:
Ayer, cuando por la noche rezaba con el Evangelio prepare el del sábado de XXVIII semana y esta mañana cuando me ponía a enviar la reflexión me he dado cuenta que la celebración de la fiesta de Santa Teresa de Jesús lleva lecturas propias. Destacar del pasaje de hoy la invitación a acudir al Señor, » Venid a mí» y también «aprended de mí» el Señor se nos ofrece como consuelo y compañero de camino.
Hoy celebramos la fiesta de Santa Teresa de Jesús, la primera doctora mujer de la iglesia. Reformadora del Carmelo, madre de las Carmelitas Descalzas , patrona de los escritores católicos y Doctora de la Iglesia. Con San Juan de la Cruz, introdujo la gran reforma carmelitana. Sus escritos son un modelo seguro en los aminos de la plegaria y de la perfección. Murió en Alba de Tormes.
Y como cada sábado, consagramos este día de una manera especial en honor a nuestra Madre, la Santísima Virgen María.
Que tengas un buen día.
Jesús Aguilar Mondéjar, sacerdote.